Una estatua de mármol de una mujer, que se cree tiene más de 2.000 años de antigüedad, fue descubierta abandonada cerca de un contenedor de basura en Neoi Epivates, cerca de Tesalónica, Grecia. El hallazgo fue hecho por un residente local, quien entregó la pieza sin cabeza a las autoridades.

Según los arqueólogos, la estatua data de la era helenística, un período comprendido entre 320 y 30 a.C., marcado por el auge del arte y la cultura tras las conquistas de Alejandro Magno.

La pieza, que mide 80 centímetros, fue enviada a expertos para una evaluación más profunda y se entregará a la autoridad local de antigüedades para su conservación y estudio.

La policía ha abierto una investigación para determinar quién desechó la estatua y ha detenido brevemente a un hombre para interrogarlo, aunque luego fue liberado sin cargos.

Este tipo de descubrimientos accidentales no es raro en Grecia, donde a menudo se encuentran vestigios arqueológicos durante la construcción de edificios u obras públicas, como sucedió recientemente con un tesoro de antigüedades hallado en el metro de Tesalónica.