El presidente de Rusia, Vladímir Putin, fue recibido este martes con honores en Ulán Bator por su homólogo mongol, Ukhnaa Khurelsukh, desafiando la orden de arresto emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) por presuntos crímenes de guerra en Ucrania. La visita coincide con el 85 aniversario de la victoria de las fuerzas mongolas y soviéticas contra Japón.

Durante el encuentro, ambos mandatarios discutieron la mejora de la cooperación en diversas áreas, como combustible, energía, transporte y medio ambiente. Además, destacaron la firma de un acuerdo para el suministro de productos petrolíferos y la expansión de la Planta de Energía Térmica No. 3, y avanzaron en la creación del Corredor Económico Mongolia-Rusia-China.

Khurelsukh agradeció la visita de Putin, mientras que el líder ruso invitó al presidente mongol a la próxima cumbre de los BRICS en Kazán y a las celebraciones del 80 aniversario de la victoria sobre la Alemania nazi. Esta visita marca un desafío significativo a la CPI, que solicitó a Mongolia la detención de Putin en cumplimiento de su mandato.