El presidente estadounidense Joe Biden firmó este miércoles una serie de leyes, entre ellas una que impone a la empresa china ByteDance, propietaria de la popular aplicación de vídeos cortos TikTok, un plazo de 270 días para venderla.

La legislación, incluida en un paquete de ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán, establece que si ByteDance no vende TikTok en el plazo establecido, la aplicación será prohibida en las tiendas de aplicaciones de Estados Unidos y en los “servicios de alojamiento de Internet” que la respalden.

Las autoridades estadounidenses acusan a TikTok de permitir que China espíe y manipule a sus 170 millones de usuarios en EE. UU.

La ley también otorga a Biden la posibilidad de extender el plazo por otros 90 días si determina que ByteDance ha progresado hacia la venta, dando a TikTok hasta un año antes de enfrentar una prohibición.

La respuesta de TikTok no se hizo esperar. El CEO de la compañía, Shou Chew, aseguró en un vídeo publicado en la plataforma que no tienen intención de desaparecer y que lucharán en los tribunales por sus derechos.

Un portavoz de TikTok calificó la ley de “inconstitucional” y advirtió que afectaría a los 170 millones de usuarios estadounidenses y a los 7 millones de empresas que operan en la aplicación.

La legislación representa el mayor riesgo para TikTok desde que las preocupaciones sobre la aplicación surgieron en 2020, cuando el gobierno de EE. UU. estableció prohibiciones para su uso en dispositivos oficiales.

Si ByteDance no logra vender TikTok antes de la fecha límite, los usuarios estadounidenses podrían enfrentar la posibilidad de ser cortados a mediados de enero. Por ahora, los seguidores de TikTok pueden seguir utilizando la aplicación, pero hay una fecha límite en el horizonte.