El Grupo de Reflexión de Excarcelados Políticos (Grex) de Nicaragua ha levantado una voz de alarma ante el fallecimiento de Carlos Alberto García Suárez, un destacado opositor al Gobierno de Daniel Ortega. 

García Suárez, quien estuvo encarcelado por participar en las manifestaciones antigubernamentales de abril de 2018, fue encontrado muerto y quemado en el basurero municipal de Jinotepe, en el departamento de Carazo, al sur del país.

El Grex ha destacado que el cuerpo de García Suárez presentaba quemaduras que afectaban al 90 % de su cuerpo. Esta organización, formada por exprisioneros políticos, ha denunciado que los excarcelados políticos están siendo objeto de persecución y hostigamiento político por parte del Gobierno de Nicaragua.

De esta manera, el grupo ha instado a los organismos nacionales e internacionales de derechos humanos a que registren este caso como un ataque más contra los ex prisioneros políticos. Asimismo, han exigido que la investigación sobre la muerte de García Suárez sea realizada por órganos competentes y serios, y no por la Policía de Nicaragua, dada la falta de credibilidad y parcialidad con la que opera esta institución.

Finalmente, el Grex ha pedido que se identifiquen y se lleve ante la justicia a los responsables directos e indirectos de este crimen, y han recordado otros casos de ex prisioneros políticos que fueron asesinados en circunstancias similares en el pasado, como los casos de Ernesto Jarquín Orozco y Marlon Antonio Castro López en el municipio de Mulukuku en 2021, los cuales aún permanecen impunes.