El Banco Central de Reserva (BCR) de El Salvador confirmó una caída del 0.4 % en las remesas familiares durante el mes de enero, marcando la primera disminución desde el inicio de la pandemia de COVID-19. En total, se registró un ingreso de $594.1 millones, una cifra menor en $2.2 millones en comparación con enero de 2023.

Las remesas, que son el principal generador de divisas en la economía salvadoreña, habían mantenido un crecimiento constante desde las drásticas caídas experimentadas entre marzo y mayo de 2020 debido a la crisis pandémica. El último mes en el que se había registrado una contracción fue en mayo de ese año, con una baja del 18.31 %.

El 92.1 % de las remesas provino de Estados Unidos, donde reside la mayor comunidad de salvadoreños en el exterior. Sin embargo, los envíos de dinero desde este país sufrieron una caída del 1.4 % en enero, superando los $547 millones, lo que representa una reducción de $7.6 millones. Por otro lado, los envíos desde Canadá experimentaron un crecimiento del 37.3 % y desde Italia un 105.5 %.

Entre los municipios que recibieron menos remesas se encuentran San Miguel, Santa Ana, Soyapango y Usulután, con disminuciones que van desde el 6.1 % hasta el 13.3 %. Estos territorios, que están entre los mayores receptores, contrastan con San Salvador, donde las remesas apenas crecieron un 0.6 %.